Acudí a Raquel porque no sabía poner límites y no sabía gestionar todo lo que se escapaba de mi control. Mi vida era un caos y el miedo era el que siempre decidía. Raquel enseguida detectó los problemas y me dio técnicas para poner límites tanto en el trabajo como en mi vida personal. Pero lo más importante es que su ayuda ha sido clave para quitarle todo el poder al miedo y hacer lo que me apetezca en cada momento y dejar de lado los pensamientos catastróficos que casi nunca se cumplen.
Mi estado emocional era un caos. Estaba perdida. No era feliz y gracias a la terapia con Raquel me he redescubierto y estoy trabajando en la mejor versión de mi en muchos aspectos.
Empezar a trabajar con Raquel es la mejor decisión que pude tomar. Su excelente trabajo ha hecho que ahora haya paz donde antes solo había miedo, dolor y oscuridad.